Estrategia 34: ¨Hacerse daño a sí mismo para ganarse la confianza de enemigo¨

- ¿Qué lo trae por acá mi amigo?, interroga el facultativo.
- Ay doctor, usted no sabe..,tengo un dolor tan, pero tan terrible en el ano que, realmente, no puedo más, estoy desesperado.
- Bueno mi amigo, vamos a ver, dice el doc y le pide que se ponga en la camilla en veinte uñas para poder examinarlo. El paciente se coloca en la posición apropiada rápidamente y con evidentes signos de dolor.
El especialista coloca un guante de goma en su dedo medio y comienza la inspección en el culo del paciente, introduce varias veces su dedo protegido con solvencia profesional hasta que topa con algo… comienza a tirar para afuera, tira y tira (tarda en salir) hasta que saca una especie de palito… chiquito, lo mira atentamente, lo gira y pregunta al paciente - ¿es esto lo que le molesta, tal vez?
- Me parece que no, dice la loca, porque me sigue doliendo una barbaridad.
El doctor, entonces, continúa la inspección con mas ahínco y concentración hasta que vuelve a toparse con algo.., tira y tira y va apareciendo otro palito, esta vez mas largo, bastante mas largo que el anterior (cree ver algunas espinas en el palito) hasta que lo saca en su totalidad y reconoce algo así como un tallo, de unos considerables veinte cm. de largo. Sorprendido, pero no tanto, debido a su larga experiencia, pregunta nuevamente al paciente (que continúa quietito y sufriente) - ¿Era esto lo que molestaba? -
- Mire doctor, no sé que decirle, pero la verdad es que me sigue doliendo..y cada vez más. Ya preocupado el discípulo de Hipócrates inicia una tercera inspección, previa llamada a su secretaria pidiendo que nadie interrumpa, penetra nuevamente con el dedo, dale que te dale hasta que nuevamente vuelve a topar con algo..comienza a tirar y comienza a emerger otro palito de la misma especie que el anterior que se va haciendo cada vez mas largo..
ya se adivina lo que es, evidentemente el tallo de una flor, el doctor sigue tirando y tirando hasta que algo se traba, hay algo que no quiere salir.. con la solvencia propia de un experto el doctor da un tirón haciendo un juego con su muñeca y en eso la cosa sale y él que ha visto todo no puede creer lo que ven sus ojos. Ante su vista tiene una hermosa rosa roja, con sus pétalos intactos, sus espinas , sus gotas de rocío, en fin, nunca vio una rosa tan hermosa.
Anonadado, confundido, casi maravillado, el doctor mira la rosa, mira al paciente, vuelve a mirar la rosa (realmente es muy bella) y le pregunta al paciente:
- Pero..¡¡por favor!!, ¿¿que es esto??
- Es para vos…tontito.


Comentario:

Como dicen la Estrategia 34 de las 36 Estrategias Chinas. Hacerse daño a sí mismo para ganarse la confianza de enemigo.
Existen gestos que tienen muchos significados, cada uno los interpreta como quiere, al realizar una acción de este tipo tenemos que tener cuidado en la reacción que podemos causar, hay que ver que significo para el proctólogo este ¨pequeño¨ gesto.

Las Habladas de Don Juan

Después de un accidente en alta mar. Don Juan se encontro naufrago en una playa y fue encontrado por una joven mujer.

Tisbea: Despierta, bello entre los hombres y se tu otra vez.

Don Juan: Si el mar me dio muerte, tu me diste vida. Pero el mar realmente me salvo para ser muerto por ti. Oh el mar me sacudio de un tormento a otro, salgo del agua y me encuentro una sirena, a ti. Para que llenarme los oidos de cera, si tu me matas con tus ojos? Yo estuve muriendo en el mar pero a partir de hoy morire de amor.

Tisbea: Tienes abundante aliento para un hombre que casi se ahoga. Has sufrido mucho, pero quien sabe que sufrimiento tienes preparado para mi?....Te encontre bajo mis pies lleno de agua, y ahora estas lleno de fuego. Si quemas ahora que estas tan mojado, que haras cuando estes seco otra vez? Prometes una llama abrasadora, espero en Dios que no estes mintiendo.

Don Juan: Querida chica, Dios tuvo que haberme ahogado antes que yo pudiera ser quemado por ti. Talvez hubiera sido mas sabio por parte del amor ahogarme antes de quemarme con tu piel. Pero tu calor es tal que aunque este en agua me quemas.

Tisbea: Tan frío y asi quema.

Don Juan: Que bueno que entiendes.

Tisbea: Espero en Dios que no mientas...

Tirso de Molina, The playboy of Sevilla

Comentario:

La palabras son la debilidad de la mujer, y el famoso Don Juan era un maestro del lenguaje de la seducción; el deseo de una mujer de ser deseada y apreciada nunca es suficiente, la gran mayoria de hombres no prestan atención a estos detalles, pero el astuto seductor que conoce esta debilidad femenina puede hacer harder a cualquier mujer que por motivos de costumbre y distracción sea ignorada por su pareja.

Culpable o Inocente

Cuenta una antigua leyenda que en la Edad Media un hombre muy virtuoso fue injustamente acusado de asesinato. El culpable era una persona muy influyente del reino, y por eso desde el primer momento se procuró hallar un chivo expiatorio para encubrirlo.

El hombre fue llevado a juicio y comprendió que tendría escasas oportunidades de escapar a la horca. El juez, aunque también estaba confabulado, se cuidó de mantener todas las apariencias de un juicio justo. Por eso le dijo al acusado: "Conociendo tu fama de hombre justo, voy a dejar tu suerte en manos de Dios: escribiré en dos papeles separados las palabras 'culpable' e 'inocente'. Tú escogerás, y será la Providencia la que decida tu destino".

Por supuesto, el perverso funcionario había separado dos papeles con la misma leyenda: "Culpable". La víctima, aun sin conocer los detalles, se dio cuenta de que el sistema era una trampa. Cuando el juez lo conminó a tomar uno de los papeles, el hombre respiró profundamente y permaneció en silencio unos segundos con los ojos cerrados. Cuando comenzaba ya a impacientarse, abrió los ojos y, con una sonrisa, tomó uno de los papeles, se lo metió a la boca y lo engulló rápidamente. Sorprendidos e indignados, los presentes le reprocharon.

- Pero, ¿qué ha hecho? ¿Ahora cómo diablos vamos a saber el veredicto?

- Es muy sencillo -replicó el hombre- . Es cuestión de leer el papel que queda, y sabremos lo que decía el que me tragué.

Comentario:

Muy audaz, si no tienes nada que perder arriesga todo, como lei una vez: "Si estas en una situación de vida o muerte decide morir y el deseo te hará libre, asi tu mente no se detendrá pensando en la muerte"

La parabola del caballo

Un campesino que enfrentaba muchas dificultades poseía algunos caballos que lo ayudaban en los trabajos de su pequeña hacienda. Un día, su capataz le trajo la noticia de que uno de los mejores caballos había caído en un viejo pozo abandonado. Era muy profundo, y resultaría extremadamente difícil sacarlo de allí.

El campesino fue rápidamente al lugar del accidente y evaluó la situación, dándose cuenta de que el animal no se había lastimado. Pero, por la dificultad y el costo del rescate, concluyó que no valía la pena, y pidió al capataz que sacrificara al caballo tirando tierra al pozo hasta enterrarlo. Y así se hizo.

A medida que la tierra le caía encima, el animal la sacudía. Esta se acumuló poco a poco en el fondo del pozo, permitiéndose subir. Los hombres se dieron cuenta de que el caballo no se dejaba enterrar sino que, al contrario, estaba subiendo, hasta que finalmente consiguió salir del socavón.

Si está "allá abajo", sintiéndose poco valorado, y si los otros le lanzan la tierra de la incomprensión, del egoísmo o de la falta de apoyo, recuerde al caballo de esta historia. No acepte la tierra que tiraron sobre usted, sacúdala y suba sobre ella. Cuanta más tierra le lancen, más podrá subir.


Comentario:

El pobre campesino con tantas tribulaciones no ideo una alternativa para sacar al caballo, el mismo caballo, no se dejo morir, sacude y para arriba, seamos como el caballo, sacude y para arriba no importa que nos hechen tierra!

El Caballo

Un hombre tenia un caballo excelente y queria venderlo. Pasó tres días en la plaza del mercado con el caballo, pero nadie le prestaba atención. De modo que hizo una visita al célebre domador de caballos Bo Le.

-Quiero vender un caballo muy bueno, pero me he pasado tres días en el mercado y hnadie ha dado muestras de interés- se quejo a Bo LE- Podrías venir y echar una ojeasa a mi caballo? Haz el favor de andar a su alrededor, mirando de cerca y marcharte depués. Pero no olvides volver la vista atrás para mirarlo de nuevo cuando te alejes. En recompensa de tu trabajo te daré todos mis beneficios de las demás ventas que haga en el día. Bo Le s epresento al día siguiente. Caminó alrededor del caballo y lo miró de arriba abajo. Cuando se marchaba , seguía volviendo la vista atrás para mirarlo. El caballo se vendió aquel mismo día por diez veces su valor.

REFLEXIONES DEL VENCEDOR

MICHAEL C.TANG

Comentario:

La astucia de los vendedores chinos, es famosa, el saber que el criterio de un experto tiene mucho peso, con solo el hecho de verlo y admirarlo, le dio un valor al caballo que aunque fuera bueno,nadie lo iba a valorar, el venderor creo algo de la nada asi como ciertos productos en el mercado se venden por tener el aval de una organización especialista en el tema.